domingo, 7 de noviembre de 2010

El Evangelio en la vida política

En una entrevista realizada por AICA, el Obispo emérito de Viedma, monseñor Miguel Esteban Hesayne, citó al papa Benedicto XVI para subrayar que "los fieles laicos deben participar activamente en la vida política, de manera siempre coherente con las enseñanzas de la Iglesia, compartiendo razones bien fundadas y grandes ideales en el proceso democrático y en la búsqueda de un consenso amplio con todos los que se preocupan de la defensa de la vida y de la libertad, la custodia de la verdad y del bien de la familia, la solidaridad con los necesitados y la búsqueda necesaria del bien común".

"Se necesitan políticos auténticamente cristianos, pero sobre todo fieles laicos que sean testigos de Cristo y del Evangelio en la comunidad civil y política”, subrayó parafraseando palabras del Pontífice.

Tras considerar que “es necesaria una verdadera ‘revolución del amor’”, reclamó: “Basta de miedos y de prejuicios en la iglesia”.

“Basta de etiquetarnos hablando de derecha o de izquierda, de progresistas o de conservadores, si queremos ser auténticos discípulos de Jesús, es preciso que manifestemos nuestro amor cristiano en obras concretas al servicio de nuestros hermanos, con la única preferencia de los más necesitados”, aseveró.

Monseñor Hesayne consideró que “es hora de poner manos a la obra. Es hora de comprender que no estamos simplemente en época de cambio sino en un cambio de época. Es hora que el tema de la globalización no es tema de claustros universitarios sino que la vivimos en la calle”.

“Es hora de que se asuma el bautismo de Jesús para cumplir la misión de miembros del Pueblo de Dios dispuestos y preparados a impregnar de Evangelio el ámbito político. No para competir sino para colaborar en la tarea de hacer política, incluso desde diversos partidos o facciones políticas. La misión del cristiano-discípulo de Jesús es ofrecer la verdad del Evangelio para lograr la actividad política como el arte de la verdad hecha en la justicia con libertad desde el amor solidario”, concluyó.
Creo que debemos meditar sobre las palabras de este humilde Obispo ya que tiene un razonamiento y un punto de vista muy interesante si tomamos en cuenta que muchas veces son los mismos prejuicios de los católicos que los hacen alejar de actividades políticas ya sea por temor al rechazo, a la adversidad, o a la falta de voluntad y decisión en caminar "contra la corriente" en un mundo impregnado en consumismo, en ideas contrarias a la fe o a la vida consagrada...
Es cuestión también de juntar fuerzas, decisión, una clara convicción de que se pueden cambiar las cosas para bien, y valentía.. ya que Dios, sin duda asistirá y ayudará brindando su sabiduría...

En su histórica visita a España, el Papa se opuso al matrimonio homosexual y al aborto

Benedicto XVI encabezó hoy una misa en ese país, donde realiza una visita oficial. Llamó a los Estados a defender "la institución familiar" con la unión de "un hombre y una mujer" y ratificó su rechazo a "todas las formas de negación de la vida humana"

El papa Benedicto XVI arremetió este domingo en España contra el aborto y defendió a la familia tradicional, oponiéndose a dos leyes estrella del gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero, durante la consagración del templo de la Sagrada Familia.

"La Iglesia se opone a todas las formas de negación de la vida humana y apoya cuanto promueva el orden natural en el ámbito de la institución familiar", recordó Benedicto XVI durante la misa celebrada en la ya basílica de la Sagrada Familia de Barcelona (noreste), en el segundo y último día de su viaje a España.

Además, defendió a la familia como unión de un hombre y una mujer, en un país en el que el matrimonio entre personas del mismo sexo se aprobó hace cinco años.

"El amor indisoluble de un hombre y una mujer es el marco eficaz y el fundamento de la vida humana en su gestación, en su alumbramiento, en su crecimiento y en su término natural", recordó.

El jefe de la iglesia Católica llamó a los Estados a dar "atención, protección y ayuda" a la familia tradicional y la vida humana.

A los gobiernos les pidió "adecuadas medidas económicas y sociales" para que "el hombre y la mujer que contraen matrimonio y forman una familia sean decididamente apoyados por el Estado", "para que se defienda la vida de los hijos como sagrada e inviolable desde el momento de su concepción" y que "la natalidad sea dignificada, valorada y apoyada jurídica, social y legislativamente".

Además reclamó medidas de esa índole "para que la mujer encuentre en el hogar y en el trabajo su plena realización".El Vaticano se opone totalmente al aborto y a cualquier forma de eutanasia.

"Solo donde existen el amor y la fidelidad, nace y perdura la verdadera libertad", estimó el Papa sobre su visión del matrimonio.

El Papa pronuncia estas palabras cuatro meses después de que entrara en vigor, en julio, la nueva legislación española sobre el aborto, que el Vaticano calificó de "insensata".

La nueva ley, que amplía la anterior, permite el aborto libre dentro de un plazo de 14 semanas y autoriza el aborto de manera excepcional hasta las 22 semanas de embarazo en caso de "riesgo para la vida y la salud" de la madre o en caso de "graves malformaciones del feto".

Se podrá practicar sin límite de tiempo en caso de "enfermedad extremadamente grave e incurable del feto", tras el examen y decisión de un comité médico.

También defendió el Pontífice la unión "entre un hombre y una mujer" en un momento en que en España las personas del mismo sexo pueden casarse desde hace cinco años, tras la adopción de una ley que convirtió al país en el tercero de Europa en permitirlo, después de Holanda y Bélgica.

Ambas leyes generaron la oposición del Vaticano, de la jerarquía de la Iglesia española y del conservador Partido Popular (PP, en la oposición), que las recurrió ante el Tribunal Constitucional.

El líder del PP, Mariano Rajoy, dijo recientemente que si llega al gobierno reformaría ambas legislaciones. El Papa, que el sábado denunció además el regreso a España de un movimiento anticlerical "agresivo", pronunció esas palabras en una misa en la que consagró la Sagrada Familia, obra cumbre del arquitecto modernista catalán Antoni Gaudí, aún en construcción.

Con una oración y rociando el interior con agua bendita, Benedicto XVI dedicó a Dios el templo, que en adelante será basílica y en ella podrán celebrarse misas.

La Sagrada Familia, original iglesia que supera el modernismo cuya construcción se financia exclusivamente con donativos, empezó a construcción hace 128 años y su conclusión se prevé en 2026.

Tras la misa, el Papa inaugurará los trabajos de construcción de una residencia del instituto Obra Nen Deu, que acoge a niños autistas y disminuidos psíquicos, y por la tarde concluirá el viaje de dos días a España tras visitar el sábado Santiago de Compostela, meta del Camino de Santiago, coincidiendo con el Año Santo Compostelano.

Nota: Infobae

Foto: Benedicto XVI saluda luciendo la capa del peregrino (AICA)

Los preparativos para la Jornada Mundial de la Juventud - Madrid 2011-